El asistente de frenado activo contribuye a reducir el peligro en la conducción. La poca separación entre vehículos es una de las causas más frecuentes de accidentes graves. El asistente de frenado activo reduce por partida triple el peligro de colisión por alcance. Así funciona:
Advertencia de distancia por radar
Si la separación respecto al vehículo precedente es menor que la distancia de seguridad durante varios segundos al circular en un intervalo de velocidad entre los 30-250 km/h, se enciende una alerta luminosa en el cuadro instrumentos. Si se reduce más la separación, a esta iluminación se le unirán advertencias acústicas a intervalos.
Asistencia al frenado en función de la situación
Si se detecta peligro de colisión con objetos en movimiento en la gama de velocidad de 7 a 250 km/h o con obstáculos parados en la gama de 7 a 70 km/h, la asistencia al frenado en función de la situación puede asistir al conductor en el frenado de emergencia, aumentando de esta manera el frenado.
Frenado autónomo.
Si, pese a la advertencia óptica y acústica, el conductor no reacciona, el sistema inicia automáticamente la frenada, reduciendo de manera clara la velocidad.
Si durante este frenado, el conductor pisa el pedal de freno, la asistencia al frenado en función de la situación interviene decelerando el vehículo hasta detenerlo por completo si la situación lo requiere.